por Yong Leos
A los 16 años hice un programa un programa muy simple en Turbo BASIC que creaba espacios estrellados con la función RAND de números enteros aleatorios. Con la barra espaciadora se creaba una nueva composición que era irrepetible e impredecible y se parecía (pensaba) a algo vivo. Recuerdo mi emoción desproporcionada con un ejercicio obvio de programación, pero sentí algo parecido a lo que debió sentir el Dr. Frankenstein con su gólem deforme. Desde entonces hago el mismo ejercicio una y otra vez.